martes, 25 de diciembre de 2012

Suicidios, nadas y todos

Suicidio. Es una palabra que ya de entrada asusta ¿verdad? S U I C I D I O. Inquietante.

Aunque poniendo las cartas sobre la mesa, todos hemos pensando alguna vez en él. No estoy diciendo que todos hayamos querido suicidarnos alguna vez, pero si hemos pensado en ello, ya puede ser en "¿Qué pasaría si esa persona que lo está pasando tan mal no lo supera y decide acabar con todo?" o "¿Y si yo me fuera de repente, que pasaría?"

N A D A. Eso si que asusta. Que no pase nada. Absolutamente nada. Ni un cambio, que el mundo siga girando como si no te hubieras ido. Aunque que pase eso es casi imposible, siempre dejamos huella en la vida de alguien, un familiar, un admirador secreto, lo que sea. Es casi imposible estar completamente solo. Aunque hay veces que si te sientes así, quizás por eso acabas yéndote, porque piensas que no pasara nada.

También sucede al revés, también puedes pensar que no pasara nada y pasara de todo. Pero claro, ya es un poco tarde para rectificar... ¿no?

domingo, 23 de diciembre de 2012

Temas peliagudos.

Me enteré de que iba a morir un día de estos con 6 años mas o menos. Bueno, realmente ya lo sabía, pero con esa edad nunca piensas en esas cosas, incluso diría que me puse a pensar en ello demasiado pronto.

No recuerdo muy bien por qué pensé eso. Creo que fue por un documental que estaban viendo mis padres, o quizás porque alguien cercano falleció. El hecho que me sorprende es que me puse triste, me puse bastante triste, pero no tenia miedo. No me daba miedo morir, me daba pena el hecho de no recordar a mis amigos y a mi familia. Pero la muerte, lo que se dice la muerte, no.

Con 6 años ya sabía que era algo que no podía controlar, que simplemente pasaría dentro de muchos años. Porque lo que si que no sabia era que los niños también se mueren.

Los niños se mueren, los jóvenes se mueren, los adultos se mueren y los viejos se mueren. Todos morimos antes o después, y es un tema que dejamos muy a parte. Hay personas que lo aceptan con 6 años como yo, y otros que nunca lo aceptan hasta que se lo explica la misma muerte.

Quizás yo tampoco lo he aceptado del todo. Y si lo he aceptado del todo, debería tener miedo.