domingo, 8 de febrero de 2015

Llamada de atención.

Llamada para ti, persona que nunca jamás leerás esto. Solo informar de que Dios, que estúpido es mirar un móvil que sabes de sobra que no va a sonar, pero que cuando termine esta frase voy a volver a hacerlo. Que quiero escribir pero no sé el qué, que necesito hablar, esa frase cutre de tumblr:

-¿Estás bien?
-Sí.
-Yo sé que eso no es cierto.

Que madre mía, esto va a ser un montón de cosas sin sentido. Como si algo que yo escribo tuviese sentido. Como si yo tuviese sentido.

Ves, ya se me han ido las ideas y no llevo ni media página. Se me han ido las musas. Se han cansado de aguantarme. Tengo 14 borradores aquí y ninguno tiene sentido. Quizás ese es el sentido, que nada nunca tendrá sentido.

Y que no sé quien te habla, si la de 9 o la de 19, que se están peleando y al final van a perder las dos. Que ahora tengo una alarma parpadeante de emergencia dentro.

Parpadeo.
Oscuridad.
Parpadeo.
Oscuridad.
Parpadeo.
Monstruos.
Parpadeo.
Monstruos.
Monstruos.

Mantita, mantita, mantita.


¿Ves? Ni puto sentido.

Dios, dime que tiene sentido para ti. Tiene que tener sentido para ti.


Parpadeo.
Parpadeo.
Oscuridad.